¿Cómo son los Chanekes?
Los Chanekes se consideran criaturas
mágicas y están fuera de la religión cristiana, aunque en la historia fueron
considerados como criaturas del demonio. Estas personitas son descritas
físicamente como Chanekes ya que poseen un cuerpo no mayor a un metro, con
orejas largas y una piel verdosa, tienen algunos poderes o algún espíritu
bromista.
A veces nos imaginamos a los Chanekes
como criaturas inofensivas, cuando en realidad no hay una explicación certera y
confiable. Muchos estudios afirman que los duendes no son más que una réplica
de manera imperfecta de los seres humanos. Hay personas quienes aseguran que
los duendes son buenos y de fiar mientras que otras aseguran que son malos.
Por lo general estas criaturas
extrañas les encanta hacer maldades a las personas y también se encargan de
esconder objetos que se encuentran en las casas o hacer cualquier tipo de ruido
que les indique a los dueños de las casas que ellos están habitando allí.
Existen varios tipos de duendes cada uno con sus características y
generalidades particulares.
Hábitat
Los duendes domésticos habitan, como
su nombre indica, las casas de las personas, donde su presencia se puede notar
por extraños ruidos nocturnos, cosas que desaparecen o cambian de sitio
inexplicablemente, o que se estropean o se arreglan solas como por arte de
magia.
La propia palabra duende parece
provenir, según el diccionario de la Real Academia Española, de la expresión
duen de casa, es decir, dueño de la casa
También, la palabra equivalente
alemana kobold podría provenir del alto alemán antiguo kuba walda, que
significaría algo como el que gobierna la casa. Algo parecido ocurre con el
término sueco tomte, que proviene de tomt, cuyo significado es parcela o finca.
En cuanto a los duendes del bosque,
son los que más muestran su afinidad con el elemento tierra. Habitan, no solo
bosques, sino también páramos, montes y grutas, o a veces, con menos
frecuencia, ríos y arroyos. El alquimista suizo Paracelso se refirió a ellos
como gnomos o pigmeos, y decía que tenían la facultad de moverse por la tierra,
igual que los peces por el agua, o los pájaros por el aire. Lógicamente, esta
clase de duendes es la que más relación tiene con otros seres feéricos de los
bosques, como los elfos, las hadas o las ninfas.
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